Bankia ha aprobado un nuevo código de conducta con el que quiere volver a establecer una relación de confianza con clientes y promotores. También abre un canal de denuncias que será gestionado por un experto independiente.

El nuevo Código Ético que ha aprobado la entidad tiene, entre otras finalidades, la de evitar que dichos comportamientos se puedan repetir. Bankia asegura que la relación con sus clientes tiene que basarse en la «confianza mutua» y, por ello, asume que, de ahora en adelante, «su actuación estará orientada no sólo a asumir sus compromisos contractuales, sino a comercializar productos y servicios de calidad, personalizados y adaptados a sus características y necesidades».

En la que parece una clara referencia a lo que ocurrió con la venta de productos híbridos, Bankia asegura que «en el momento de la contratación de productos financieros es necesario asegurarse de que el cliente no sólo entiende su contenido y beneficios, sino también los riesgos y costes». Bankia también quiere mejorar su relación con los proveedores y con sus empleados, luchando contra la discriminación y favoreciendo la conciliación de la vida familiar y profesional.

Una de las claves del nuevo código es que el grupo se dota de un canal de denuncias que podrán utilizar tanto los empleados como los proveedores y que será gestionado por un experto independiente. Bankia se dota de un nuevo Código Ético para alejarse de los errores del pasado.
Michela Romani2013